Actualmente Taylor Swift es una de las artistas más consagradas en la industria musical, incluso fue elegida como artista de la década en 2019 por los American Music Awards. Pero este reconocimiento llegó gracias al gran esfuerzo que hizo la cantante desde que decidió que quería dedicar su vida a la música. Hace 15 años la estrella lanzaba su primer álbum, el cual tituló Taylor Swift.
Todo comenzó cuando Swift tenía 11 años. Decidida y confiada en su talento, ya que en ese momento ya componía sus propias canciones, la artista visitó Nashville, Tennessee, la cuna del country, junto con su familia en busca de un contrato de grabación. Pero esta todavía era considerada muy pequeña por las discográficas, y no fue hasta los 14 años, cuando finalmente se mudaron allí, que empezaría a recorrer el camino de sus sueños.
En el 2005 la artista se presentó en el mítico espacio The Bluebird Café, y fue entonces cuando llamó la atención de Scott Borchetta, jefe de Big Machine Records, con quien firmó un contrato. Casi 15 años después este la traicionaría, y en 2019 vendió su discográfica a Scooter Braun, quien se quedó con los derechos de la música de Swift. Ahora esta se encuentra en proceso de regrabar sus primeros 6 discos.
Sus historias de desamor, inseguridad, y de las típicas vivencias de una adolescente de 15 años se convirtieron en un éxito rotundo cuando su disco debut salió a la venta un 24 de octubre de 2006, lo cual no era común en el mundo del country.
Incluso el single debut de Swift, Tim McGraw, el cual se publicó antes de la salida de su primer disco, revolucionó los rankings musicales. La artista contó que coescribió el tema con Liz Rose en solo 15 minutos, un día que volvió del colegio y un chico le había roto el corazón. “No quería grabar las canciones de otras personas. Quería que hubiera algo que me diferenciara. Y sabía que tenía que ser mi forma de escribir”, expresó en su momento.