LALI es el nombre de esta nueva entrega que, como ella misma aseguró, es su producción más personal y sincera: “Ahora se abre un nuevo camino, para una nueva LALI. ¡Viva el Pop! Es para ustedes, amores indisciplinados.”
El nuevo álbum de Lali contiene no solo sus singles ya lanzados como “2 son 3”, “Disciplina”, “Cómprame un brishito”, “N5” y “Motiveishon”, sino también temas inéditos como “¿Quiénes son?”, con la voz de Moria Casán, y “K.O.”, con la guitarra y los coros de Ca7riel.
En este álbum, la cantante vuelve a los sonidos eléctricos de los 2000, con un tono enérgico y sensual. En este sentido, la canción “Obsesión” podría ser cantada como un himno en español junto a The Cheetah Girls.
El guiño de época se vincula con la esencia pop de la argentina (esa que tiró abajo las paredes del estadio Velez y rompió el streaming) y unas letras directas de deseo y exaltación.
“La Reina” pega en el hueso con una lírica sin filtros y no se achica con nada. En este disco, Lali es la prueba viviente del dicho “todo lo bueno viene en frasco chico” (y lo escribe alguien que no supera el metro cincuenta de altura).